Tuesday, June 23, 2009

Declaración de constitución del Movimiento Democrático Nacional Progresista - Tayyar

Con la conciencia del creciente peligro para la causa nacional palestina; en aras de la victoria de nuestro pueblo en el logro de la liberación, la independencia nacional, el regreso de los refugiados a sus hogares, y el establecimiento de un Estado independiente con Jerusalén como su capital, y con el reconocimiento de la necesidad de unificar los esfuerzos nacionales de los elementos democráticos de nuestro pueblo y de galvanizar la lucha, tanto en Palestina como en la diáspora, para fundar una verdadera democracia unitaria, a fin de enfrentar la ocupación y sus políticas racistas de colonización:

Anunciamos la creación del Movimiento Democrático Nacional Progresista [Tayyar], que refleja nuestro compromiso con el derecho de retorno, la libre determinación, el logro de los objetivos de la lucha nacional y la unificación de todas las personas en Palestina y la Diáspora, a fin de fortalecer su papel en la lucha nacional y social, establecer su presencia en el sistema político, e influir en la toma de decisiones a nivel nacional.

El Movimiento Democrático Nacional Progresista se inició como una respuesta necesaria y objetiva al desafío de unir todos los esfuerzos para hacer frente a las políticas racistas y coloniales de la ocupación, que hace 60 años desarraigó a nuestro pueblo de sus hogares y tierras en el más horrendo acto de limpieza étnica en la historia moderna. La ocupación ha continuado aplicando sus políticas agresivas a través de la confiscación y la judaización de tierra palestina, los asesinatos, detenciones, demolición de viviendas, la judaización de Jerusalén y el desplazamiento de sus residentes palestinos, la confiscación de tierras para la construcción del Muro del Apartheid, el asedio, y el establecimiento de retenes militares, lo que fragmenta los territorios palestinos y los aísla en guetos y cantones, con el fin de imponer sobre el terreno un hecho consumado y socavar la causa nacional palestina, mientras usa negociaciones frívolas y las divisiones del pueblo palestino para cubrir sus prácticas represivas. La Ocupación se beneficia del silencio internacional, la colusión del gobierno estadounidense, la normalización de relaciones con algunos países árabes y la ausencia de una estrategia nacional única para resolver el conflicto árabe-palestino-israelí.


La actual intensificación de las divisiones en el escenario político palestino ha causado el mayor daño a la cuestión nacional palestina y al movimiento de liberación nacional palestino. Esto ha llevado a un peligroso atolladero, como lo ocurrido en Gaza, cuando las diferencias internas se resolvieron a través de las armas en junio de 2007. Junta con esta división, la izquierda progresista se ha mantenido en un estado de fragmentación y desintegración, lo que ha afectado negativamente a la realidad de la sociedad palestina.


Salir de esta situación requiere la puesta en marcha de un amplio diálogo nacional para poner fin a la situación actual de división y restablecer la unidad nacional, la formación de una autoridad de transición para devolver el gobierno al pueblo a través de la elecciones presidenciales y legislativas, así como la activación y el desarrollo de la OLP como el único legítimo representante del pueblo palestino. Se debe trabajar para dar cabida a la participación de todas las fuerzas y los actores presentes en el escenario nacional palestino y para la construcción de instituciones nacionales y sociales y sindicatos populares sobre una base democrática, acorde con la plena representación proporcional, y al mismo tiempo, rechazando cualquier intento de recurrir al uso de la fuerza, la violencia y las armas en la solución de las diferencias internas.


El Movimiento Democrático Nacional Progresista se inició para dar una respuesta positiva a la necesidad de reformar el sistema político palestino, para que pueda continuar la batalla de la liberación nacional y la independencia, en aras de defender la dignidad de los ciudadanos palestinos y sus derechos legítimos a una vida libre y decente, basada en la igualdad de oportunidades y la competencia honesta, en el marco de instituciones democráticas que crean en el multilateralismo y el respeto a la razón, la libertad de expresión y de acción, y las normas y reglamentos de la ley.

Los firmantes de esta declaración son activistas que trabajan a nivel comunitario y nacional, y que representan un amplio espectro de orígenes diversos, reunidos por su creencia en la defensa de los principios y valores nacionales de democracia social consagrados en la Declaración de Independencia de Palestina, con un proyecto democrático nacional progresista sobre la base del pluralismo, la tolerancia y la apertura, en una sociedad que cree en la justicia social, la igualdad entre hombres y mujeres, así como el respeto a los derechos humanos personales y colectivos y las libertades democráticas. El Movimiento Democrático Nacional Progresista se compromete con las cuestiones de los trabajadores, los campesinos y las campesinas y los y las pobres, con los hijos y las hijas de clase media de nuestro pueblo y con todo aquel y aquella que combate la corrupción, que afecta a los intereses de la inmensa mayoría de nuestro pueblo.

Afirmamos los siguientes elementos básicos:


1. Resistencia a las políticas opresivas de la ocupación sionista, incluida la denegación de del derecho de los refugiados palestinos de regresar a sus hogares, la negativa sionista a aplicar la Resolución 194 de la ONU, la continua confiscación de tierras, la expansión de los asentamientos, la judaización de Jerusalén, la construcción del muro del apartheid y el encarcelamiento de miles de Palestinos. Estas políticas no detendrán la determinación del pueblo palestino de continuar la lucha y perseguir nuestros derechos nacionales por todos los medios que nos conceden los tratados y leyes internacionales. Vamos a proseguir la lucha a través de la resistencia popular, la movilización de masas y la participación de las masas en la toma de decisiones, así como mediante el desarrollo de una estrategia nacional de resistencia a la ocupación y para su aislamiento en el escenario internacional, mientras que creamos alianzas y frentes en casa y en el extranjero para mejorar la constancia y la rehabilitación de los elementos sociales del pueblo palestino.


2. Rechazo a la utilización de las armas en la solución de conflictos internos en el escenario palestino, que ha llevado a una situación de división política y geográfica entre Cisjordania y la Franja de Gaza y ha servido para complicar la situación de la lucha palestina. Enfatizamos que todavía estamos en una etapa de la liberación nacional que requiere el diálogo y la unidad, en lugar del conflicto por el poder y la influencia y la continuación de políticas partidistas basadas en intereses particulares, y la muy extendida corrupción, que ha generado graves daños a la sociedad palestina y ha destruido sus valores morales. La falta de voluntad política para luchar contra la corrupción y hacer responsables a sus autores amenaza nuestro proyecto nacional


3. El Movimiento Democrático Progresista Nacional es parte del movimiento árabe e internacional anti-imperialista y anti-sionista que promueve un nuevo orden mundial, basado en el respeto de los derechos de los pueblos a la libre determinación y el establecimiento de relaciones internacionales equilibradas, que garanticen políticas equitativas para el desarrollo humano sustentable, como bases para la cooperación conjunta entre los pueblos en función de los intereses colectivos, y de acuerdo a los conceptos de justicia y de respeto a los derechos humanos.


4. El Movimiento Democrático Nacional Progresista está comprometido con el fortalecimiento de la elección democrática, el poder compartido y la unidad nacional y, al hacerlo, en la creación de un orden para desafiar a la ocupación y consolidar una sociedad palestina, involucrando a las personas en la toma de decisiones, la comunicación con la gente, y la difusión de los valores de la solidaridad, el respeto a la transparencia y las autoridades; la lucha contra la corrupción, la exclusión, la dominación; y el desarrollo de mecanismos para transformar el programa en práctica real en el. terreno.


Hacemos un llamamiento a todos los que creen en las ideas del Movimiento Democrático Nacional Progresista para unificar sus filas y comprometerse en batallas diarias contra las políticas y proyectos coloniales sionistas, representados en la judaización de Jerusalén, los continuados y diarios asesinatos y detenciones, la imposición del asedio y el hambre a las masas de nuestro pueblo y el Muro del Apartheid. Hacemos un llamamiento a aquellos que creen en la lucha por la dignidad, por una mejor forma y medios de vida y el respeto de la ley, para unir las fuerzas de nuestro pueblo, representadas en firmes personalidades nacionales, federaciones, sindicatos de comercio y profesionales, organizaciones de la sociedad civil, y para concentrar sus esfuerzos en la protección de la causa nacional, en la tarea de construcción de una democracia de rígida adhesión a los principios, los derechos nacionales y el desarrollo social.

El Movimiento Democrático Progresista Nacional enfatiza en el compromiso de sus miembros, con los derechos nacionales y sociales, y la aplicación del pluralismo político, a fin de evitar la liquidación del proyecto nacional palestino y lograr la libertad, la justicia y la independencia, por el bien de nuestro pueblo.


Julio 2008

No comments:

Post a Comment